
Wayne W. Dyer fue, sin duda, uno de los autores inspiracionales más importantes de la era que hoy vivimos. Quien fuera el autor de libros como El Poder de la Intención y Tus zonas erróneas abandonó el cuerpo hace unos días, pero nos dejó un legado de frases que pueden hacer mejores nuestros días.
¿Mi frase favorita de él? ¡Soy realista, espero milagros!
Aquí te compartimos una selección de 20 de sus frases más hermosas y famosas.
También puede interesarte leer: Las frases de El Principito que nos llegan al alma
- Si cambias la forma en que miras las cosas, las cosas que miras cambian
- Cuando juzgas a otros, no los defines, te defines a ti mismo
- Máxima para la vida: te tratarán en la vida en la forma en que enseñas a la gente a tratarte
- No tiene sentido preocuparse por cosas sobre las que no tienes control, porque no hay nada que puedas hacer. ¿Por qué preocuparse sobre cosas que no puedes controlar? La preocupación te mantiene inmovilizado
- Nuestras vidas son una suma total de las decisiones que hemos tomado
- Sé desgraciado. O motívate a ti mismo. Hagas lo que hagas, es tu elección
- Practica ser el tipo de persona que te gustaría atraer
- No hay estrés en el mundo, solo gente pensando pensamientos estresantes
- Si crees que funcionará, verás oportunidades. Si crees que no lo hará, verás obstáculos
- No hay escasez de oportunidades para ganarte la vida de lo que amas, solo hay escasez de voluntad
- La necesidad de aprobación de los demás equivale a decir: Lo que tú piensas de mí es más importante que la opinión que tengo de mí mismo
- Estás condenado a tomar decisiones. Esa es la mayor paradoja de la vida
- Lo verás cuando lo creas
- Prefiero ser odiado por lo que soy, que amado por lo que no soy
- El antídoto para el miedo es la fe
- No hay camino a la prosperidad, la prosperidad es el camino
- Eres lo que eliges ser hoy, no lo que has escogido ser antes
- Cómo te trata la gente es su karma, cómo reaccionas es el tuyo
- Tienes todo lo que necesitas para una completa paz y felicidad ahora mismo
- El estado de tu vida no es más que un reflejo del estado de tu mente